Amen a sus propias plantas nativas. Este debería ser el lema de los jardineros aficionados y profesionales por igual paisajistas que quieren conseguir el mejor equilibrio entre la belleza de la obra de la madre naturaleza y la belleza de los esfuerzos del hombre. Piense en ello: estas plantas hardbearing mezclan bien con el paisaje ya que estos son en realidad parte del paisaje.
Aparte del aspecto forma de las plantas nativas que se cultivan en su hábitat natural, la parte de la función es sin duda la mejor razón para hacerlo. Piense en ello: este tipo de plantas se adaptan fácilmente a las condiciones locales ya que estos se adaptan exclusivamente al clima, suelo y agua, y la geografía de la localidad. Plantas indígenas a continuación requieren poco mantenimiento una vez que se establecieron en la zona.
¿De qué manera las plantas nativas adaptadas únicamente a su hábitat natural?
• Tolerancia a la acidez del suelo o basicidad
Plantas indígenas han desarrollado sistemas de raíces adecuadas para las condiciones del suelo, que puede ser ácida (pH inferior a 7), neutro (pH de 7) y básico (pH superior a 7). Las plantas que entonces pueden crecer en suelo ácido no van a prosperar en el suelo de base y viceversa.
Por ejemplo, arándanos, arándanos y orquídeas crecen en el suelo con los niveles de pH de 4,5 a 5 (ácida); lila y Brassica prosperan en el suelo con los niveles de pH de 7,1 a 8 (básico), y crisantemos, dalias y tulipanes como el suelo con niveles de pH del 6,5 al 7 (neutro). Lilas de plantas en suelos ácidos y éstos morirán de la misma manera que las orquídeas cultivadas en suelos básicos se marchitan en poco tiempo. Con su tolerancia a las condiciones locales del suelo, las plantas nativas se requieren menos cuidado en la conversión del suelo y la aplicación de fertilizantes, entre otras cosas.
• Resistencia a plagas y enfermedades
Las plantas nativas son también más propensas a ser resistentes a las plagas y enfermedades comunes en la zona. Los pesticidas y los insecticidas son entonces de poco o ningún uso, que también significa menor impacto negativo sobre el medio ambiente (es decir, la lixiviación de sustancias químicas en el suelo y el nivel freático).
• Aprobación de las condiciones climáticas
Las plantas nativas también han evolucionado para adaptarse a las extremas condiciones climáticas de la zona. Por ejemplo, arces de cobertura, goma dulce, negro y cereza son aptas para el cultivo en zonas con mucha exposición a los aerosoles salinos mientras palmeras, mirtos y zinnias son ideales para jardines en lugares ventosos.
De hecho, las plantas nativas son los mejores cuando se trata de proyectos de jardinería y paisajismo por su naturaleza de bajo mantenimiento, por no hablar de que estos también son más asequibles para la compra de la guardería local.
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